INESE ha entrevistado a Antonio Muñoz-Olaya, Presidente de Cojebro, con motivo del 30 aniversario de la Organización Empresarial de Seguros.
En esta entrevista, Antonio habla sobre logros más destacados y la evolución de Cojebro desde su creación, hace tres décadas, de los cambios en la industria aseguradora en los últimos tiempos, las aportaciones de Cojebro al a sector asegurador, sus socios… y mucho más.
‘ACTUALIDAD ASEGURADORA’ (EN ADELANTE ‘A.A.’).- ¿Cuáles han sido los logros más destacados de Cojebro desde su creación hace 30 años? ¿Cómo describirías su evolución?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- Cojebro nació hace ahora tres décadas como una asociación profesional, con un origen que se basaba en la amistad y camaradería de sus fundadores. Hoy, no sólo se mantiene este espíritu, sino que se ha incrementado y se han potenciado las sinergias y colaboraciones entre los socios que nos hemos ido incorporando a lo largo de estos treinta años. En el ámbito profesional se han dado grandes pasos en el devenir de la asociación, aumentando exponencialmente su perfil mercantilista y proporcionando numerosos servicios a sus socios, fundamentalmente en las áreas de negocio, tecnológica, formativa y legal.
‘A.A.’.-¿Cómo ha cambiado la industria aseguradora durante estas décadas? ¿Cuáles han sido los cambios más significativos y qué han supuesto para Cojebro?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- El mundo del seguro está en constante evolución y adaptación. En los últimos 30 años el sector, en general, y la mediación, en particular, ha experimentado cambios significativos que han venido impulsados por una manifiesta necesidad de avances tecnológicos para competir mejor y de regulaciones normativas que nos exigen dotación de recursos para su obligado cumplimiento. La digitalización nos ha permitido procesos más eficientes, desde la mera cotización hasta la gestión de pólizas, recibos, siniestros, etc. Además, incorporando la dificultad que conlleva la personalización de productos y servicios para satisfacer mejor las necesidades específicas de los clientes.
Los corredores nos hemos tenido que adaptar a un entorno más competitivo, más exigente, en el que prima la importancia de la asesoría personalizada, la transparencia y la eficiencia operativa. La pandemia de COVID-19 ha sido un acelerador de cambios tecnológicos en estos últimos años, a través de un incremento cuantitativo y, a la vez, salto cualitativo de soluciones digitales, que ha puesto de manifiesto, una vez más, la resiliencia del sector.
‘A.A.’.- ¿Cómo ha ayudado Cojebro a sus miembros a adaptarse a todos esos cambios?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- Cojebro intenta cuidar lo mejor posible el marco relacional, tanto entre sus socios como con instituciones y aseguradoras… Estas interacciones relacionales ayudan muchísimo a explorar, conocer y compartir experiencias, además de conocer el lado humano de las personas con las que trabajamos, incluso fuera del entorno laboral.
Además, para nosotros, la formación siempre ha sido un factor clave; constituye una herramienta esencial para proporcionar asesoramiento competente y ayudar a adaptarnos a un entorno en constante evolución. Hace años creamos Campus Cojebro, Cojebro Junior y, próximamente, Cojebro Sucesores, todas ellas iniciativas que fomentan la formación de alto nivel y la profesionalización de las nuevas generaciones.
También el desarrollo tecnológico ha supuesto un im-portante hito en cuanto a ayudas a los socios: cuadros de mando, cotizador propio, APP, Hub de conectividad, foros… son algunos de los desarrollos que se han llevado a cabo en los últimos años.
‘A.A.’.- ¿Qué estrategias han implementado a nivel tecno-lógico? ¿Cómo les ha afectado el desarrollo de la tecnología?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- Como decíamos anteriormente, la tecnología es una parte fundamental para el desarrollo de los corredores. En la asociación contamos con un equipo de cinco personas (internas y externas) dedicadas en exclusiva al desarrollo tecnológico. Sin duda, hemos apostado firmemente por mejorar y automatizar los procesos que nuestros socios hacen todos los días.
‘A.A.’.- ¿Qué iniciativas han contribuido al crecimiento del número de miembros?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- En Cojebro llevamos a cabo varias iniciativas centradas en la RSC: el Camino Cojebro solidario, que este año celebrará su VII edición, los premios Cultura y Seguro, las acciones medioambientales de SegurLike Planet – el documental de La Selva de Cristal, el Bosque Cojebro, reforestaciones en la selva amazónica peruana- o las acciones de SegurLike Help, acciones de voluntariado en comedores sociales. Estas acciones no van dirigidas a incrementar el número de socios, en absoluto. Cojebro no pretende ser la organización empresarial de seguros más numerosa, pero sí intentamos ser referentes e influyentes en el sector y, a la postre, de esta forma, estamos diferenciándonos de la competencia y, consecuentemente, beneficiando a nuestros socios.
PERSONALIZACIÓN DE POLIZAS
‘A.A.’.- ¿Cómo han cambiado los clientes y la demanda de seguros a lo largo de estas tres décadas?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- En los últimos años, ha habido cambios significativos en los hábitos de compra de los clientes y demanda de seguros, impulsados por una mayor exigencia del consumidor en inmediatez, transparencia y, a la vez, siendo cada vez más consciente de la importancia de los seguros para proteger sus activos y mitigar riesgos. La demanda de personalización de pólizas ha aumentado dado que, cada vez más, los clientes buscan opciones que se adapten específicamente a sus necesidades y estilo de vida, lo que ha llevado a un aumento en la oferta de productos de seguros flexibles y a medida.
Además, la digitalización ha transformado la forma en que los clientes interactúan con nosotros. A su vez, otro aspecto que, cada vez está tomando más relevancia es la preferencia de los clientes por aseguradoras que impulsen políticas éticas, de responsabilidad social, sostenibilidad medioambiental, diversidad, etc., lo que, en poco espacio de tiempo, llegará a convertirse en un factor determinante para la toma de decisiones de compra. En nuestro caso, desde Cojebro, estamos asumiendo estas iniciativas de responsabilidad social, incorporando en nuestra actividad empresarial los criterios ESG, que tratamos de cumplir en la mejor forma posible.
Todos estos cambios reflejan una evolución de la demanda, expectativas y preferencias de los clientes, lo que nos impulsa a adaptarnos y ofrecer soluciones innovadoras que satisfagan las nuevas demandas del mercado.
‘A.A.’.- ¿Cómo les afecta la falta de coberturas que hay actualmente en el mercado para algunos riesgos?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- Sin duda esta falta de coberturas limita nuestra capacidad para ofrecer opciones completas a los clientes y afecta a las relaciones comerciales.
En una situación de mercado duro, como el que estamos viviendo ahora, es vital estar cerca del cliente. La transferencia del riesgo a aseguradoras es nuestra principal función, pero también el asesoramiento en detección, prevención, gestión del autoseguro, etc. forman parte de una conveniente y adecuada gerencia de riesgos que, en cualquier circunstancia, va implícita en un cualificado asesoramiento por nuestra parte, más en esta época de deficiencia de coberturas del mercado asegurador.
Dicho esto, considero que nuestra industria, nuestro sector tiene una responsabilidad ante la sociedad que no puede eludir. Debemos esforzarnos todas las partes en encontrar soluciones que resuelvan estos problemas de falta de respuesta aseguradora. La función social y responsabilidad del seguro tienen que ser compatibles con el legítimo interés empresarial de la industria aseguradora.
A.A.’.- Y las modificaciones legislativas, ¿qué consecuen-cias han tenido y están teniendo para vosotros?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- Las exigencias normativas son cada vez mayores en cualquier empresa. A las puramente fiscales, las más numerosas en el ámbito laboral (plan de igualdad, protocolos de prevención frente al acoso, de discriminación, de desconexión digital, registro retributivo, registro de jornada, teletrabajo, gestión de riesgos psicosociales, etc.), las de carácter general (protección de datos, canal de denuncias, prevención de blanqueo de capitales, etc.) hay que añadir las específicas de nuestra actividad, altamente regulada, lo que nos obliga a una elevada asignación de recursos económicos y humanos.
Además, en una gran parte de esas exigencias normativas, no se tiene en cuenta el tamaño y dimensión de la empresa, lo que aumenta la desproporción de las exigencias normativas y la actividad real de las pequeñas empresas.
La política condiciona a la sociedad o la sociedad condiciona a los políticos -no sé qué fue primero, si el huevo o el pollo-. Las empresas, en general, y las de mediación, en particular, estamos hiper reguladas, lo que nos obligaa cambios de procesos que repercuten directamente en nuestra cuenta de resultados y en la dispersión del foco comercial y de asesoramiento, dos elementos esenciales de la supervivencia de nuestras empresas.
‘A.A.’.- ¿Ha notado cambios significativos en la percepción o la conciencia de la importancia del seguro en la sociedad durante este período?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- Sí, en los últimos años, ha habido un cambio significativo en la percepción de la importancia del seguro. La creciente conciencia sobre los riesgos financieros y la necesidad de protección ha llevado a más personas y empresas a reconocer el valor del seguro. Desastres naturales, pandemias y eventos impredecibles han destacado la vulnerabilidad patrimonial y financiera, impulsando a empresas y particulares a buscar coberturas adecuadas. Asimismo, la digitalización ha facilitado el acceso a contar con más información sobre seguros, lo que, a su vez, está permitiendo a los consumidores tomar decisiones más informadas.
En general, observamos una mayor concienciación por parte de la sociedad en que el seguro es una herramienta esencial para la seguridad patrimonial y financiera de personas y empresas.
‘A.A.’.- ¿Cuáles son los planes de Cojebro para los próximos años?
ANTONIO MUÑOZ-OLAYA.- Nuestro objetivo principal es empresarializar nuestra asociación, aunque la palabra no existe, sí es ilustrativa de nuestros planes: consolidar, mejorar y aumentar los servicios que se vienen prestando para que nuestras corredurías sean más rentables, más sostenibles, aumentemos nuestra dimensión mediante acciones, proyectos y compromisos compartidos y centralizados.
Fuente: INESE.